El divorcio se pudiera describir como una pareja de casados que deciden que ya no desean seguir respetando sus votos matrimoniales. Aunque por lo común sólo una persona inicia la acción; las dos pueden haber contribuido en alguna forma a la ruptura.
El divorcio es una experiencia desgarradora y sus heridas se curan con mucha lentitud. Se necesita tiempo para que aclaren todas las cosas y para que puedan afrontar objetivamente sus situaciones. Puede que les resulte muy difícil identificar y resolver todos sus sentimientos de enajenación, rechazo, amargura y confusión. Puesto que hay un elevado porcentaje e matrimonios que concluyen en divorcio, es muy probable que un consejero tenga que abordar este problema.
Nota: Billy Graham comentó: “Me opongo al divorcio y considero el aumento actual de esos procedimientos como uno de los problemas más alarmantes de nuestra sociedad. Sé que el Señor puede perdonar y sanar, incluso cuando se hayan cometido pecados graves. La iglesia se compone de pecadores. Cuando Pablo les escribió a los corintios, dio una lista prolongada de males y, luego añadió: “Y esto erais algunos” (1 Corintios 6:11) Habían recibido el perdón y se habían convertido en parte de la iglesia, del cuerpo de Cristo”.
Nota: Billy Graham comentó: “Me opongo al divorcio y considero el aumento actual de esos procedimientos como uno de los problemas más alarmantes de nuestra sociedad. Sé que el Señor puede perdonar y sanar, incluso cuando se hayan cometido pecados graves. La iglesia se compone de pecadores. Cuando Pablo les escribió a los corintios, dio una lista prolongada de males y, luego añadió: “Y esto erais algunos” (1 Corintios 6:11) Habían recibido el perdón y se habían convertido en parte de la iglesia, del cuerpo de Cristo”.
Estrategia de asesoramiento:
1. Es muy necesario darle ánimo a esa persona.
El interlocutor puede sentirse rechazado y haber perdido todo sentido de su valor personal. Esto es muy común en las personas divorciadas. Díganle que les agrada que les haya llamado y que están dispuestos a hablar con él o ella. Dios nos ama y nos acepta exactamente tal y como somos.
2. Háganle preguntas a su interlocutor respecto a su relación con Jesucristo.
¿Recibió alguna vez a Jesucristo como su Señor y Salvador? Si es apropiado, compartan con esa persona las Cuatro leyes espirituales. Aunque puede sentirse rechazado, enajenado y destruido, hagan hincapié en que Dios puede hacer todas las cosas nuevas (2 Corintios 5:17). Lo hecho –el divorcio- quizás no se pueda deshacer. El interlocutor deberá partir el punto en que se encuentre, para reconstruir su vida sobre nuevas bases. Y el fundamento es Jesucristo.
3. Denle consejos relativos a la importancia de la lectura de la Biblia y la oración como medios para fortalecerse.
¿Tiene una Biblia? Si no es así, recomiéndele que vaya a una librería cristiana local para obtener una fácil de entender, versión internacional.
4. Recomiéndele a esa persona que acuda al Centro Cristiano de Los Teques, donde va a encontrar compañerismo, cultos de adoración y oportunidades para servir al Señor.
Puede necesitar tiempo para obtener comprensión y nuevas relaciones personales. Con frecuencia, un grupo de cristianos solteros puede proporcionar el ánimo necesario.
5. Oren con su interlocutor para que obtenga alivio para sus emociones, paz mental, nueva confianza, fortaleza y discernimiento espiritual.
6. Recomiéndele que busque asesoramiento especial, si cree necesitarlo. El pastor o un psicólogo cristiano pueden ser muy útiles.
Puntos que deben recordar al dar el consejo:
1. Lo hecho es cosa del pasado. Partan del punto en que se encuentre su interlocutor en este momento y vayan adelante.
2. Traten de orientar la conversación de modo que esa persona no considere necesario hacer un “análisis retrospectivo” de su experiencia. En lugar de ello, traten de enfocar su atención en Dios que le ayudará a obtener soluciones.
3. Permanezcan neutrales. No den por sentado que su interlocutor es culpable ni inocente. La expresión de un juicio con una actitud de superioridad cerrará las puertas para el testimonio.
4. Los cristianos no son inmunes al desplome de los matrimonios. Si su interlocutor es verdaderamente cristiano, hagan lo que sigue:
A. Pídanle que confiese su amargura, su ira o cualquier otro pecado. Puede tener que afrontar de modo realista las actitudes negativas que hayan contribuido a su divorcio. Compartan con él los temas de la “Restauración”.
B. Animen a la persona de que se trate a desarrolla un nuevo interés por la lectura y el estudio de la Biblia. También deberá ser fiel en la oración. “Echando toda vuestra ansiedad sobre él, porque él tiene cuidado de vosotros” (1 Pedro 5:7)
C. Animen al interlocutor a que establezca o renueve una relación con una iglesia, a pesar de los sentimientos d culpa o temor a las críticas que pueda tener. Necesitará la iglesia más que nunca. Es posible que encuentre en ella un grupo de solteros que podrá ayudarle.
D. Oren con esa persona para que obtenga alivio y consuelo, paz mental y capacidad para realizar los ajustes necesarios para un tipo de vida diferente.
Citas Bíblicas:
Ánimo para andar con el Señor:
“Fíate de Jehová de todo tu corazón, y no te apoyes en tu propia prudencia. Reconócelo en todos tus caminos, y él enderezará tus veredas” (Proverbios 3:5-6)
“Por nada estéis afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración y ruego, con acción de gracias” (Filipenses 4:6)
“Procura con diligencia presentarte a Dios aprobado, como obrero que no tiene de que avergonzarse, que usa bien la palabra de verdad” (2 Timoteo 2:15)
“Antes bien, creced en la gracia y el conocimiento de nuestro Señor y Salvador Jesucristo” (2 Pedro 3:18)
Curación de las heridas:
“Bendice alma mía a Jehová, y no olvides ninguno de sus beneficios. El es quien perdona todas tus iniquidades, el que sana todas tus dolencias” (Salmo 103: 2-5)
“Sáname, oh Jehová, y seré sano; sálvame, y seré salvo; porque tú eres mi alabanza” (Jeremías 17:14)
2 Timoteo 1:7
Salmo 23:3
1 comentario:
MATRIMONIO ES TERRENO SAGRADO.
No solamente nuestro matrimonio ha sido diseñado para el romance, sino que Dios lo estableció como un terreno sagrado, donde él quiere moverse y operar. El matrimonio deseado entonces es un matrimonio donde se guarda el romance y donde caminamos como en terreno sagrado.
“Por eso el hombre deja a su padre y a su madre, y se une a su mujer, y los dos se funden en un solo ser.” Génesis 2:24. ( NVI)
Acá aparecen en este versos Tres verbos que son determinantes:
• Dejar.
• Unir.
• Fundir.
Dejar implica una renuncia a las o los demás. Es decir en el alma: “ He dejado a mis padres y a los demás o a las demás para estar contigo”. Es una Renuncia al hogar de donde vengo y no dejar que haya interferencia alguna de nuestros padres o familiares y va más allá, dejar a los o las demás. Estamos entrando entonces en un nuevo terreno. Un Terreno sagrado que no puede ser invadido.
“ Todo lo que vale la pena en la vida implica algo que necesita dejarse atrás” Serafín Contreras G.
Unir implica crear por decisión propia un lazo permanente que no puede desatarse fácilmente. Muchos dejan algo pero les falta entrar en el paso de unir. El matrimonio necesitar de un pegamento firme que no lo separe cualquier circunstancia adversa en la vida.
“ Se necesitan dos para hacer un matrimonio de éxito y solo uno para destruirlo” Herbert Samuel.
El ultimo y más profundo verbo en este verso es:
Fundir: Y este verbo implica perder algo y mezclarlo con lo que pierde el otro colocándonos en un momento en la vida que no sabemos lo que es del uno y lo que es del otro. Es ser una sola carne.
La Biblia habla muy bien de todo esto.
Mateo 19: 4-6.
Efesios 5:21-23.
Publicar un comentario